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“Mi Salomé”. Así la llamaba Gustave Moreau.
Mucha libertad se habían tomado escritores y artistas a la hora de imaginar a la princesa. Pero Moreau fue más allá.
Su Salomé es más que la femme fatale definitiva.
Más que alarde de eclecticismo estético y de sincretismo religioso.
PROSERPINA O EL TIEMPO DEL AMOR
Muchas veces me pregunto cómo medimos nuestro tiempo. Más allá de agendas o calendarios. A veces un acontecimiento inusitado comienza a marcar los intervalos de los días. Y entonces el tiempo se vuelve una entidad dúctil y prismática. Como el amor.
Por fortuna, esta joven al borde de la muerte -la calavera- recibe el abrazo de Hygeia (Higía), diosa de la salud, la higiene y la curación en esta alegoría de Robert Auer (1914). Lo sabemos por la copa con serpiente enroscada con su brillante y misterioso fármaco sanador.
Una de las modelos prerrafaelitas más conocidas fue KEOMI GRAY, de ascendencia romaní, que posó en la década de 1860 para Frederick Sandys. Keomi encarnó a Medea, Judith, Vivien y Morgan Le Fay. #DiaInternacionalPuebloGitano @interculturaml @l_circe