Blas y las astrales (2000). Una macarrada divertida, el tontipop más punki.

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¿Volverás? (1999) de Juniper Moon. Una colección de canciones de adolescentes enamorados y cabreados con los que es fácil empatizar. Junto a su segundo EP, Basado en hechos reales (2000), es de lo mejorcito que tienen.

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Hearts 日本 EP (2009) de Heartsrevolution. Una mezcla cruda de ruido, errores y belleza. De mis canciones preferidas: Choose your own adventure!, Digital Suicide (Lullaby) y 薔薇と彼女の王子 (The Rose and Her Prince).

2 7

Late (2012) de Florrie. No tiene discos largos sino singles potentes y elegantes para bailar (o lo que sea), y este es quizá mi preferido.

6 11

Tourism (1992) de Roxette. Una recopilación de algunas de sus mejores canciones en directo y en acústico más algunas inéditas. Incluso cuando se ponían más rockeros eran suaves, pero sus canciones funcionaban como relojes y algunas eran (y son) estupendas.

6 14

Siamese Dream (1993) de los Smashing Pumpkins. Tiene marcha, alegría, tristeza y belleza, amén de una cantidad de canciones descartadas tan buenas o más que las que entraron en el disco, algo poco común.

2 7

Happy Nation (1993), de Ace of Base. Está repleto de temazos y me sigue gustando tanto hoy como entonces.

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