Tiende sus manos al infinito
preservar su ser libre, eterno,
es su batalla.

Sabe a quién entrega
la pureza de su alma
el fuego de su pasión,
esa es su victoria. 
⬆️2/2

ʍɨֆɛʀ

9 79

Por los prados cosecha libertades,
al canto de las doncellas en el río
acude travieso, sin dificultades.

Sigue su camino
sin temores
abriendo paso a los atardeceres,
alcanzando las horas nocturnas,
donde quemar los ayeres.
⬆️2/2

ʍɨֆɛʀ

7 67

Advertí su voz ronca gritando
sin cesar;
-Es mi deseo
varar mi cuerpo en la orilla
y bajo la mar 
mi alma acomodar 
en brazos de una sirena-.

 Así me convertí en tormenta.

ʍɨֆɛʀ


⬆️2/2

9 82

Veo lucha
en sus palabras,
a veces cordiales
a veces puñales.

Más allá de algunas verdades
entra en batallas
lanza el pensamiento
bien argumentado
casi nunca, el sentimiento profundo.

Habla de honores
victorias futuras,
entre oscuridades
de heridas calladas.
ʍɨֆɛʀ

23 113

Aprendió este corazón
a viajar en solitario.

Escuchando silencios
comprendí del caos la razón.

No abandono la ilusión
al calor del abrazo.

Cuando la vida
juegue su partida con el destino.

Tal vez, nos hallemos
en el mismo tablero,
las mismas calles vacías.

ʍɨֆɛʀ

14 77

Dime,

¿quién permanece a tu lado?
¿Quién decora tus sueños?

Tal vez, las palabras seductoras
de quien se acomodó en tu pecho
sin permiso, ni licencia.

Tal vez, la esencia de tu alma,
eterna y leal compañía.
2/2 ⬆️

ʍɨֆɛʀ

12 76

Porque, no puedo negar,
en ocasiones,
negándome a juzgar,
este mundo me sorprende
con nobles corazones
a veces perdidos
entre las sombras y los rincones.
⬆️2/2

ʍɨֆɛʀ

3 38

Abrázame, silencio …

¿Acaso es mucho lo que pido?

Deslizarme por el trapecio
del mundo bullicioso
en la línea del equilibrio
concentrada, sin tambaleo,
apreciar todo cuanto veo.

¿Acaso es mucho lo que pido?

ʍɨֆɛʀ

25 124

Yo, que nada sé
de las desdichas
escondidas
tras las sonrisas
maquilladas.

De los poemas
que ofrecen esperanzas,
escritos con tinta oscura
en profunda tristeza.

De quien no quiere rescate
y déspota rechaza
estimarte.

Aun así, yo sigo aquí.

ʍɨֆɛʀ

14 75

Guardé el llanto en una nube

Llueve.
Riega la lluvia
el desierto que anduve.

En el hueco de las piedras recogidas
sembré azucenas.

Seguí caminando
plantando emociones
sin mirar atrás.

Sé que vendrás
a buscarme
con un puñadito de flores
y sentires nobles.

ʍɨֆɛʀ

18 75

En el reino del silencio
el sol observo,
la lluvia contemplo,
las verdes ramas buscando el cielo.

Mirando la grandeza
de la naturaleza
ínfima quedo,
apenas una gota de agua
en el mar inmenso.

Qué fortuna la mía
desde mí nada
mi alma entregada
todo acaricia.

ʍɨֆɛʀ

26 112

Para enfrentar los males
amor brinda el alma.

Sin hacer razones
los sentimientos
alumbran nobleza.

Me perdoné la vida
cuando no sepa
reconocer su enseñanza.

Aquí donde
se halla mi alma
se vive,
se siente,
sencillamente se ama.

ʍɨֆɛʀ©

8 65

Ligera sutileza en sus pasos,
camina sobre el río.

Descalza entre piedras
y plantas danza.

Negro atuendo,
desprende mariposas
luz del alma.

El viento agita los cabellos
soltando los pensamientos.

Viene a tu encuentro
con la pureza de sus sentimientos.

ʍɨֆɛʀ©

18 83

Encaramada a la escalera
seguía subiendo
con esfuerzo los peldaños.

Le dijeron que arriba estaban
las respuestas
a todo lo que parecía extraño.

¡Ay, si bajara!
Tras la puerta
en su interior
descubría
en el silencio
la intuición
hablando
con la voz del alma.
ʍɨֆɛʀ

12 68

⬆️2/2
Recitaba las palabras
cosechadas en el tiempo,
capturadas
en la lengua del sabio.

En un suspiro los descubrió
el amanecer con la vida 
desnuda en las manos.

ʍɨֆɛʀ ©

6 59

⬆️2/2
Ha roto los roles
que le fueron adjudicados
desgarrados en actos liberadores.

Jamás ha batallado por dejar aflorar
su esencia
esa es su victoria
y el sentido de su existencia.

ʍɨֆɛʀ ©

9 61

Libre navegó
entre nubes
y pececillos
de colores.

A mi soledad
no venga a decirle
que de fantasías
no se vive.

En los sueños
no hay imposibles
y una vez por la mente traducidos
sean realidades
abriéndose camino 
a paso firme.

ʍɨֆɛʀ ©

20 112

⬆️2/2
Si, ese cuento
que relata como la furia
de las sirenas
al verse engañadas,
hundían los barcos.

Ya no habría tierra prometida,
los cuerpos suyos serian
por toda la eternidad.

Alto precio se paga 
por las promesas embridadas de falsedad.

ʍɨֆɛʀ ©

10 59

Me acostumbré a estar en la calma
de mi espacio.

Dime, ¿quién te dio permiso
para romper  todas
mis defensas?

Sales y entras 
como si me habitaras
desde el principio
de los tiempos.

Dime, ¿qué hago ahora,
con los escombros de mi coraza?.

ʍɨֆɛʀ ©

10 55

Es la única
constante
en un
mar
de
variables.

Siempre
está
contigo
tu
esencia
tu
Alma.
¿La conoces?

ʍɨֆɛʀ

12 79